Repicado del solado existente en mal estado, ya sea cerámico o de mortero, eliminando cualquier capa de revestimiento suelta o deteriorada, hasta alcanzar una base firme. Incluye la carga manual de los residuos generados en contenedores y su transporte a vertedero autorizado.
Identificación y Preparación: Inspección del solado existente para determinar las áreas afectadas. Delimitación de las zonas a intervenir mediante marcaje.
Repicado: Eliminación mecánica mediante martillo percutor o herramienta manual, según el estado y tipo de revestimiento. Retirada completa de las capas sueltas o en mal estado para garantizar una base sólida.
Carga Manual y Gestión de Residuos: Acopio temporal de los residuos generados en la zona de trabajo. Carga manual de los escombros en contenedores homologados. Transporte de los residuos a vertedero autorizado cumpliendo con la normativa vigente en gestión de residuos de construcción.
Limpieza de la Base: Limpieza de residuos y polvo generado durante el proceso de repicado. Revisión de la superficie base para asegurar que está lista para las siguientes fases del trabajo.
Valoraciones
No hay valoraciones aún.